«Si uno avanza confiado en la dirección de sus sueños y acomete la vida que se ha imaginado para sí, hallará un éxito inesperado en cualquier momento.» Henry David Thoreau
Los anhelos más elevados del corazón funcionan como una brújula que nos guía por el camino que debemos seguir hacia la transformación personal y el perfeccionamiento espiritual.
Estos anhelos nos inspiran y animan a revolucionar nuestra vida personal y espiritual. Nos preparan y otorgan la valentía necesaria para vivir un proceso de transformación, el cual exige enfrentar y trascender nuestros miedos y limitaciones adquiridas a lo largo de nuestra historia de vida.
Cómo es de esperar y usual por nuestra naturaleza divina y humana, muchas veces cometemos errores y nos desviamos del camino, errores necesarios por cierto para reconocer y confirmar el auténtico camino hacia nuestra perfección y evolución.
Transformarnos no significa convertirnos en otra persona, sino llegar a ser nuestra mejor versión. Una versión mejorada de nosotros mismos, sin miedos ni limitaciones, con un nivel de conciencia y vibratorio elevado, el cual es capaz de hacer realidad los sueños más ambiciosos.
Los anhelos del corazón nos inspiran, apasionan, engrandecen y fortalecen, ellos alimentan nuestra vida en su totalidad. Renunciar a estos llamados implica la cobardía de dar la espalda a nuestra autentica felicidad.
CUANDO NUESTRA MEJOR VERSION SE HACE CARGO DE NUESTRA VIDA
Cuando descubrimos nuestro poder interior, y comprendemos la verdad de nuestra naturaleza divina, entonces una mente superior se hace cargo de todos nuestros asuntos personales. Esa mente organiza todos los recursos cósmicos para manifestar esos anhelos sublimes del corazón.
Cuando tu mejor versión ha tomado las riendas de tu vida descubres virtudes, dones y talentos únicos en ti, algo que nunca antes lo habías imaginado.
¿Cómo conectamos con esa mente suprema?
Conectas con esa Mente Suprema escuchando y creyendo en los sueños de tu corazón.
Teniendo la valentía de vivir ese proceso de transformación y enfrentar el lado oscuro de tu humana personalidad.
Asumiendo los riesgos que plantea atreverse a vivir la vida de tus sueños.
Nuestros sueños y nuestra transformación nos inspira, nos conecta con nuestro Espíritu.
Y cuando nuestra mejor versión es llamada a emerger y encargarse de nuestros asuntos, milagros empiezan acontecer en nuestras vidas.
4 comentarios
Muy bello. Yo quiero más de esto.
Me gustaria tener más información al respecto. Muchas Gracias.
Me encantó.
Alejandra: cuan cierto. transformarnos no es llegar a ser otro sino recuperar nuestra mejor versión que yace dormida en nuestro interior. Gracias, Bendiciones.